El Programa de Diabetes de la provincia de Buenos Aires (PRODIABA) comenzará a distribuir empagliflozina y liraglutida, dos tratamientos con buenos resultados para controlar esta enfermedad.

La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por presentar niveles altos de glucosa en sangre (o azúcar en sangre). El azúcar en sangre (glucemia), cuando tiene valores por encima de lo normal, se lo denomina hiperglucemia, y cuando se sostiene en el tiempo puede dar lugar a complicaciones en diferentes órganos. Se estima que 1 de cada 10 personas de 18 años o más en la provincia de Buenos Aires tiene diabetes y dado que, por varios años permanece sin síntomas, aproximadamente el 40 por ciento de quienes la padecen desconocen su condición. Para contener el avance de esta patología, el Ministerio de Salud bonaerense creó el Programa de Diabetes de la provincia de Buenos Aires (PRODIABA), que atiende la necesidad de los pacientes. Esta semana, el plan anuncio que comenzará a distribuir dos nuevos medicamentos en el marco de su cobertura: empagliflozina y liraglutida. “Ambos están destinados a personas adultas con diabetes que no alcanzan los objetivos terapéuticos y que presentan enfermedad cardiovascular establecida y/o enfermedad renal crónica”, informaron. Estos medicamentos, recalcaron las autoridades, “han demostrado beneficios para reducir la mortalidad, las hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca y los nuevos eventos cardiovasculares y renales”. Además, reducen la hemoglobina glicosilada, con un bajo riesgo de hipoglucemias severas y pueden favorecer el descenso de peso. Según destacaron las autoridades del PRODIABA, estos medicamentos se distribuirán al igual que los insumos y medicamentos del plan a través de las 12 regiones sanitarias y contará con “un proceso de auditoría de características similares al actual para la solicitud de lapiceras de insulina del programa”. Según la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), con las nuevas evidencias de que tanto la empagliflozina como la liraglutida tienen beneficios cardiovasculares, algunos cardiólogos se preguntan cuál elegir. En primer lugar, los expertos en diabetes subrayan que son fármacos de dos familias diferentes. La empaglifozina es un inhibidor SGLT-2 y la liraglutida un análogo GLP-1, por lo que sus mecanismos de acción son distintos. Además, la empaglifozina es un medicamento de administración oral, mientras que la liraglutida es inyectable. A través del Programa de Diabetes de la Provincia de Buenos Aires se brinda a las personas con diabetes, con cobertura pública exclusiva, las herramientas para un adecuado control de su patología. Se destaca la provisión de insumos farmacológicos y no farmacológicos para el tratamiento de la diabetes. Esto incluye diversos tipos de insulinas, antidiabéticos orales en comprimidos, jeringas y agujas para la aplicación de insulina y tiras reactivas para determinar el nivel de glucosa, entre otros. Durante la actual gestión, el PRODIABA logró un aumento de cobertura del 65,9 por ciento con respecto a diciembre 2019 lo que significa que más de 77 mil personas son alcanzadas por el programa en la actualidad. Se estima que unas 442 millones de personas viven con diabetes en el mundo, y este número se duplicará en los próximos 20 años. El crecimiento de la diabetes 2 es particularmente preocupante en los países de bajos y medianos ingresos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). En la Argentina, 9,8 por ciento de la población mayor de 18 años padece diabetes, de acuerdo con la Tercera Encuesta de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación.

Fuente: Mirada Profesional