El Ministerio de Salud extiende la receta electrónica a todas las indicaciones médicas
Buenos Aires, 21 de julio de 2025 – Mediante la Resolución 2214/2025, el Ministerio de Salud de la Nación amplió el uso obligatorio de la receta electrónica. Lo que hasta ahora se implementaba únicamente para medicamentos, se extiende ahora también a medicamentos de prescripción restringida, estudios, prácticas, procedimientos y dispositivos médicos.
Esta medida, impulsada por el ministro Mario Lugones, formaliza la transición iniciada el 1° de enero, en cumplimiento con la Ley 27.553 y la digitalización progresiva de las prescripciones médicas. Según el comunicado oficial:
Interoperabilidad, confidencialidad y trazabilidad serán los pilares de este sistema integral.
Todas las plataformas deben estar registradas en el ReNaPDiS (Registro Nacional de Plataformas Digitales de Salud), garantizando acceso universal, sin importar el financiador.
Una innovación clave es el uso del CUIL como identificador principal del paciente y la implementación de la Clave Única de Identificación de Receta (CUIR), para asegurar integridad y seguridad en cada prescripción.
Asimismo, se establece un procedimiento específico para digitalizar recetas archivadas y restringidas (psicotrópicos o estupefacientes), que deben conservarse en repositorios electrónicos por al menos tres años, apuntando a fortalecer el control sanitario.
Los plazos para los actores del sistema sanitario son los siguientes:
45 días para implementar la identificación unívoca de recetas.
90 días para habilitar la prescripción electrónica de recetas archivadas.
120 días para incorporar las recetas restringidas al sistema digital.
En zonas con baja conectividad o dificultades técnicas, se mantiene la opción de recetas en papel, mientras se completa el proceso de digitalización.
Con esta resolución, el Ministerio apunta a consolidar un sistema de salud más moderno, eficiente y transparente. La digitalización de las recetas busca no solo facilitar la gestión médica, sino también asegurar un uso responsable de los recursos públicos y una mayor transparencia en el sistema sanitario.
Fuente: Pharmabiz.net