Elea presentó un Procedimiento Preventivo de Crisis
La empresa, una de las grandes del mercado nacional, presentó este instrumento ante la situación económica que vive. Este es el paso previo a despedir personal y realizar otras medidas de ajuste. Vinculan la realidad a la compra de la firma Phoenix.
Hace unos días, el laboratorio Craveri despidió cerca de 50 empleados, y denunció una situación de crisis que afecta a toda la industria farmacéutica. La recesión y el aumento de los costos, en su mayoría dolarizados, son parte de una realidad que golpea a los productores de medicamentos, que esta semana se cobró otra víctima. Se trata de Elea, uno de los grandes jugadores del sector, que presentó el denominado procedimiento Preventivos de Crisis, el paso previo para realizar despidos y ajustes en su estructura. Según la información suministrada, el pedido se hizo ante el Ministerio de Producción y Trabajo, que planteó para los próximos días una audiencia para analizar los números de la firma, y los pasos a seguir. Elea se sumó a la lista de unas 30 compañías que apelaron a este procedimiento en lo que va del año en un contexto de caída de ventas, y marca los problemas que tienen los productores de medicamentos, que pasaron de ser uno de los puntales de la economía nacional a un presente de crisis y preocupación.
Elea es una de las firmas emblema de la industria farmacéutica de bandera nacional, y opera en el país desde 1939. Por su importancia, es el tercer laboratorio argentino, con productos que van desde los medicamentos OTC a los de cardiología y oncológicos. Esta semana, por la crisis que vive el sector, presentó un Procedimiento Preventivos de Crisis, una herramienta creada para intentar ayudar a las empresas a evitar los despidos y demás medidas drásticas. "La empresa realizó el pedido de apertura de Procedimiento Preventivo de Crisis. En los próximos días se realizará una audiencia entre las partes para analizar la situación de la misma", afirmaron voceros del Ministerio de Producción, citados por el portal Infobae, sobre la medida. Elea compró a mediados del 2017 la empresa farmacéutica Phoenix. Según trascendió, la fuerza de ventas “quedó por encima del que se requiere en comparación a laboratorios del mismo tamaño”.
En medio de una fuerte caída de ventas en el mercado interno y endeudada en dólares, la empresa necesitaría despedir entre 100 y 120 trabajadores. Sucede que con la compra de Phoenix, Elea amplió su plantilla laboral de 800 a 1.200 personas. Y pasó a tener 370 visitadores médicos, frente a los entre 120 y 210 que tienen otros laboratorios grandes nacionales. Al presentar el procedimiento, Elea argumentó que tiene tres años de balances negativos y que tomó la decisión de afectar hasta un 5 por ciento de la plantilla con sus despidos.
Elea es la firma encabezada por Hugo Sigman, Daniel Sielecki y Luis Gold, que buscaba quedar mejor posicionada en la producción de genéricos. Sigman es uno de los principales empresarios del sector de los laboratorios, con operación en varios países. Además de los laborarorios, es productor de cine. Elea cuenta con plantas industriales de producción orientadas principalmente en las áreas de salud femenina, cardiología, neurociencias, oncología y venta libre. En este último segmento, produce marcas de uso masivo como el Caladryl, el Evatest o el Nopucid. La adquisición de Phoenix incluyó la planta de producción en Villa de Mayo, las oficinas comerciales y laboratorios y la cartera de productos, entre ellos el popular Pervinox.
En lo que va del 2019 ya fueron 30 las empresas que pidieron a la Secretaría de Trabajo la apertura de PPC, según informó el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en el Congreso. Se trata de la etapa previa a despidos o suspensiones de personal que en los últimos tiempos volvieron a incrementarse en el país con casos resonantes como Fate, Coca Cola Femsa o Avianca.
El desplome de la industria farmacéutica es uno de los emblemas de la crisis económica que se desató en los últimos años. Durante el kirchnerismo los laboratorios crecieron por encima del promedio del país, pero el nuevo escenario golpeó fuerte en el sector, y lo sumergió en la crisis general. Según datos de la consultora Ecolatina, entre el 2005 y 2015 la industria farmacéutica nacional “experimentó un gran crecimiento de 83 por ciento en el acumulado del período, una tasa de crecimiento promedio anual de 6,2 por ciento”. “Así, el crecimiento fue superior en más de dos veces y medio al de la industria manufacturera en su conjunto, que se expandió a 2,4 por ciento promedio anual en el mismo periodo”, destacó la consultora. “En 2017, a pesar de que hubo una mejora en la coyuntura, la producción nacional de medicamentos experimentó, por primera vez en más de una década, una contracción y la facturación de la industria local (ventas al mercado interno y exportaciones) se redujo 6,6 por ciento en términos reales”, remarcó el trabajo. En tanto, en 2018 se frenó la caída, pero no hubo recuperación, ya que se generó una nueva caída del 0,8 por ciento en 2018.
Fuente: Mirada Profesional